La música es tan antigua como la creación del mundo, el Homo Ergaster y el Homo Erectus comenzaron a emitir los primeros códigos sonoros al desarrollar las glándulas sudoríparas, lo que le permitió modular sonidos con las cuerdas vocales, ya que dejó de jadear para refrescarse, utilizando la voz para comunicarse, no sólo para fines prácticos, también los sonidos formaron parte de la ritualidad, los sonidos tienen una importancia muy grande en la vida del hombre, incluso hoy en día.
Desde la época prehispánica existieron variedad de instrumentos, con una amplia difusión por todo el continente, aunque no están escritos los sonidos de la antigüedad, hay evidencia de su amplio y alto desarrollo, en el que hay conceptos mágicos. Los sonidos del ambiente como los instrumentos y la voz conformaron una unidad sagrada , expresados a través de los instrumentos más sagrados, que fueron entendido como la voz a de los dioses, estos instrumentos sagrados fueron tratados con gran respeto e incluso se les construyeron y dedicaron templos, y altares junto a los dioses de la música y la danza.
Es probable que con la migración desde Asia, el ser humano del Paleolítico Superior haya traído ya las flautas de carrizo que ellos utilizaban, en los grupos de recolectores cazadores de 10,000 a.C. se encuentran silbatos de hueso con una perforación, que producen sonidos de animales.
Imitar los sonidos de la naturaleza era un medio eficaz para comunicarse y cazar, demostrando que se puede incidir en el mundo natural a través de los sonidos, como la evocación de la lluvia como medio mágico para provocarla. Raspadores de hueso, caparazones de tortuga, flautas de carrizo y cerámica, teponaztles, ocarinas, jícaras de agua, palos de lluvia, sonajas de calabaza, trompetas de caracol, cascabeles de metal.
Los sonidos el ritmo y el movimiento se mezclan con el mundo espiritual, la construcción de los instrumentos se dió junto a la construcción de los Centros ceremoniales y de manera simultánea al desarrollo de la cerámica en el Preclásico (2500 a.C. - 150d.C.) se fabricaron silbatos y flautas de cerámica, en Tlatilco Estado de México se encontraron trompetas de caracol, los vasos silbadores, rellenados con agua, sonaban solo con el movimiento sin que hubiera necesidad de soplarle, a estos contenedores se les atribuía una función mágico ritual.
En las culturas de occidente se fabricaron las primeras flautas dobles, que producen interferencias y efectos psico acústicos, las figurillas indican que los curanderos usaban, tambores, sonajas y raspadores, junto al consumo de plantas psicoactivas médicamente dosificadas, para el alivio de problemas psiquiátricos.
Ya para el Clásico (150 d.C – 759/900 d.C.) pequeños centros se caracterizaban por tener su propia música, ya era muya amplia la variedad de instrumentos de aliento, en Tres Zapotes, Veracruz, se encontró una flauta de pan, la fabricación de flautas alcanzó su apogeo con las flautas cuádruples de Teotihuacan, Estado de México y la Costa del Golfo, dando un salto al desarrollo de escalas musicales más complejas, en los famosos murales de Bonampak, Chiapas, aparecen trompetas rectas, caparazones de tortuga, sonajas de calabaza y un gran tambor, las trompetas de caracol alcanzaron tal importancia sagrada que se les dedicaron templos completos, como el Templo de los Caracoles Emplumados de Teotihuacan los murales del Templo de los Jaguares muestra a los felinos soplando caracoles emplumados con boquilla, en la procesión de unos sacerdotes.
Otros extraordinarios instrumentos son dos grandes raspadores de costillas de ballena encontrados en Monte Albán, Oaxaca, los restos óseos de animales prehistóricos , las costillas probablemente eran consideradas de seres gigantescos de eras pasadas, desempeñan un papel muy importante en el culto a los antepasados.
En el Postclásico (900-1521 d.C.) Por medio de la metalurgia llegaron nuevos instrumentos como las cascabeles y placas de metal hechas de cobre, que probablemente sirvieron como Címbalos o Gongs pequeños. Se ofrendaron cascabeles de oro en Chichen Itza, Yucatán, así como en los entierros de Monte Albán, Oaxaca.
Entre los instrumentos importantes se encontraron los palos de sonajas, los tambores mexicas, muestra relieves con el símbolo 4 movimiento, así como a Xochipilli dios de la música.
La representación en piedra de un Teponaztli, muestra a Macuilxóchitl, destaca una flor en su boca que es la metáfora del canto y los ojos en la palma de las manos.
La creación del hombre entre los mexicas fue anunciada con caracoles, atribuyéndose así un gran potencial creativo a su sonido. Otro mito cuenta la creación de los tambores, En una era cuando la tierra aún no existía, los instrumentos vivían como cantantes en la corte del sol, para dar a los hombres la oportunidad de comunicarse con los dioses, Tezcatlipocatl, en una versión y Ehécatl en otra versión, se pusieron camino al sol para atraer a los cantantes a la tierra con la ayuda de su canto ritual, y aunque el sol prohibió a los cantantes que escucharan, el canto fue tan poderoso que logró atraer a la tierra a los cantantes, donde finalmente se manifestaron como tambores. Este mito trata a los tambores como seres divinos que descendieron a la tierra, los músicos eran los mediadores expertos, que establecen el enlace con el mundo espiritual, lo que produjo la formalización de las escuelas de música para cuando llegaron los españoles tenían 3000 años de historia musical.
Musica de guerra, evangelización musical
Bernal Díaz del Castillo, dice que Hernan cortes ordenó pregonar 2y tocar trompetas y atambores en nombre de su majestad” antes de salir rumbo a Cuba, ya en San Juan de Ulúa mandó a fray Bartolomé de Olmedo, “que era gran cantor” a celebrar misa cantada el domingo de pascua frente a los gobernadores y principales enviados de Moctezuma, en su relato dice que, el estruendo de la guerra enmudece ante la capacidad negociadora y manipuladora de Hernán Cortés, mediante la celebración de una misa cantada en el mismisima entraña del palacio del gobernador prisionero, el conquistador sacraliza el espacio, el dominio invisible de la música, ostenta quien ha sido conquistado, hasta lo profundo y sagrado, lo más íntimo ha sido violado y sacralizado.
Es el siglo 16 se escuchó la misa en canto llano, una sola línea rítmico-melódica, cantada al unísono por varias voces, alternando con parte polifónicas de dos o más líneas con personalidad propia, que se combinan.
La música después de la conquista. Pedro de Gante, en sus centros de instrucción para indios, le enseñó las primeras nociones de la fe con música, los frailes crearon coros y capillas para indios al abierto, donde se cantaba y se desarrollaban las festividades religiosas, enseñaron también las obras musicales de Josquin de Prez, Thomas de Crecquillon, Orlando de Lasso, Cristóbal de Morales, músicos que establecieron los paradigmas de las músicas cultas del siglo 16.
Estas enseñanzas fructificaron en los pueblos indígenas, ya que no eran reprimidos al interpretarlas, fusionándose así las tradiciones musicales del periodo prehispánico con el periodo colonial, motolinia relata que aprendieron de tal manera el canto que se volvieron maestros en ese arte, se convirtieron además en grandes apuntadores y compositores de música (motetes y villancicos), tanto que un natural de Tlaxcala compuso en canto polifónico, “una misa entera aprobada por los buenos cantores de castilla que la han visto” (Motolinía, 1996.pp. 55 y 169-170)
Ciertamente esta conquista musical tuvo marcado desprecio por la tradición indígena, considerando la sonoridad que los indígenas integraban a la palabra y la danza, como estridentes o desafinadas y sobre todo monótonas, pero causa sorpresa el testimonio de los frailes que relatan la rapidez con la que los indígenas adaptaron a su vida la tradición musical europea.
Gante percibió “toda su adoración dellos a sus dioses era cantar y bailar delante dellos” y por eso compuso unos “metros muy solemnes” en lengua náhuatl sobre la fe y la encarnación de Cristo, la víspera de la navidad de 1527, los príncipes mexicas y miles de macehuales cantaron toda la noche el milagro de Belén, de modo tal, que según Fray pedro, hasta los mismos ángeles los oyeron desde el cielo.
En el estilo renacentista europeo, el estilo uniforme de esta polifonía fue escrito para ser cantado “a cappella” una música vocal en la que los instrumentos, si los hay, duplican o sustituyen una voz, . Para esto el Órgano resultó fundamental, en el siglo 17, los sacabuches (antiguos trombones) cornetos y arpas hicieron su aparición en las catedrales novohispanas.
A las composiciones polifónicas de creación individual el cabildo les llamó Chanzonetas y posteriormente villancicos ( composición poético-musical típicamente española, compuesta por un estribillo a manera de refrán que alterna con estrofas), el maestro de capilla tenía que componerlas para las procesiones o para alternar con las lecturas y responsorios, navidad, corpus christi y epifanía o las dedicada a la Virgen María. También componían para eventos profanos como las bienvenidas de obispos y virreyes.
Para el siglo 17, cambió mucho la cultura del entretenimiento , la nueva clase social de los criollos considero que los musicos indigenas hacian juegos e invenciones que podían integrarse a las fiestas novohispanas, así pues no había celebración sin los mitotes de los cantos indígenas, encontrando la música indígena espacios lícitos para su desarrollo, conviviendo con el culto católico y en algunas ocasiones con ritmos y danzas de la tradición africana
En 1600 el cacique Juan Cano Moctezuma, representó una obra en la que Hernando de Alvarado Tezozomoc, representó al emperador azteca “llevado en andas, cubierto por un palio, y delante iban danzando hasta llegar al palacio” así nació una tradición fuerte en el ámbito criollo novohispano.
Con la representación de la danza de Moctezuma, los indígenas aportaron al discurso criollo las reivindicaciones de las pretensiones políticas de los intereses criollos novohispanos, así como fue una práctica visible de los naturales para reafirmar y proyectar con dignidad su identidad tan reprimida y condenada.
En la segunda mitad del siglo 18, la vida cotidiana se fue alejando de la iglesia, haciéndose más mundana, se organizan Saraos en los que se tocaba y bailaba mientras se disfrutaba de bocadillos y bebidas refrescantes, se hacía ostentación de vestidos y joyas.
En el siglo 18 ingresaron a las capillas , los violines, oboes, flautas, cornos, trompetas y timbales, por el nuevo estilo “Concertato” característico del barroco europeo, y a mediados de siglo adquiere la influencia del “bel canto” de la ópera italiana y de melodías dulces del estilo galante.
Fuera de las iglesias los nobles, hacendados, comerciantes, altos funcionarios amantes de las fiestas fueron creando su propias músicas, a diferencia de lo que sucedía en españa que regularmente se contrataba a los músicos de las capillas, hicieron primero de la vihuela de mano su instrumento preferido y posteriormente la guitarra, para acompañar cantos y danzas. Es amplia la variedad de guitarras que hoy en día existen en el país.
La llegada de Grupos Holandeses, Chinos, Japoneses, Italianos, Africanos, Norteamericanos, Guatemaltecos, Franceses, etc.
Modernamente en el siglo 20 surge la industria musical cambiando radicalmente la manera no solo de consumir la musica, sino tambien de producir y difundir la música, creando artista a medida de jovencitos ociosos, como respuesta al surgimiento de estilos musicales de izquierda, considerados revolucionarios, con critica social que incluso tenian audencia dentro de los jóvenes de las esferas sociales altas. Así se promovio fuertemente como en los inicios de la conquista, la formación de “cantores” musicos al estilo neo (colonial) liberal, por su eficiencia en la evangelización de los indios.
A lo largo de los siglos hemos fusionado las tradiciones musicales nativas con las importadas de Africa, Asia y Europa, hoy en día con los alcances de las comunicaciones por internet, en tiempo real, es muy fuerte el intercambio musical y su multi gramática de pertenencias y símbolos, seguimos enrriquesiendo nuestro panorama musical gracias a las aportaciones de los migrantes, que nos transmiten sus valores y tradiciones con generosidad y alegría
La industria musical ha limitado mucho las opcionesdel publico, así como trivializado el placer y gozo musical, dejenerando la sensibilidad del publico, con formulas y ritmos estudiados para crear productos, artistas y canciones lucrativas, sin contenido humano, computadoras y bailarines son colocados en los medios masivos para vender espejos a los jovenes marginados, desaparecen las escuelas de música y aparecen las aplicaciones en el telefono celular para ser un “Dj” robot del bit de moda.
Y siguen conservandose aun en uso muchas canciones de la tradición ritual indígena en distintos lugares, como en las iglecias indígenas de Chiapas y Guatemala.
Referencia:
Para mayor información compre la revista de Arqueología Mexicana dedicada a la Música Prehispánica. Vol XVI-NUM.94 o en www.arqueomex.com